Sin embargo, los legisladores se resisten a dar mayores atribuciones a autoridades sanitarias para fiscalizar y sancionar las reformas nacionales que vienen en camino.
15 de noviembre de 2012 — El nuevo acuerdo internacional para frenar el comercio ilícito de tabaco, aprobado esta semana en la reunión cumbre del Convenio Marco para el Control del Tabaco, dará nuevos instrumentos legales a Chile para enfrentar un fuerte aumento de cigarrillos “piratas”.
El nuevo protocolo de la Organización Mundial de la Salud «da al mundo un instrumento metódico basado en normas para combatir y finalmente eliminar una sofisticada actividad criminal internacional», según la directora general de la OMS, Margaret Chan.»El comercio ilícito es malo para la salud porque sortea medidas como impuestos y aumentos de precios que se sabe que reducen la demanda».
En Chile, las incautaciones de cigarrillos contrabandeados están en alza. En lo que va del año, se ha incautado un total de 137 millones de cigarrillos «pirata», según cifras recabadas por la Cámara Nacional de Comercio (CNC) desde Aduanas, Carabineros y la PDI, y citados por el diario La Segunda. La cifra representa un aumento del 23% en las confiscaciones de este producto con respecto a 2011. Según el estudio de la CNC, lo que deja de percibir el Estado en concepto de impuestos pasó de $4.660 millones el año pasado a casi $5.550 millones actualmente.
Según La Segunda, el contrabando de cigarrillos “ha llegado a tal nivel de planificación que algunas de las cajetillas ‘pirata’ llegan desde el extranjero con las advertencias sanitarias exigidas por la legislación chilena, con el fin de simular productos del mercado formal”.
Bajo el nuevo acuerdo mundial, los países tendrán que establecer, como medida central, un sistema de seguimiento y rastreo mundial, a través del control de la cadena de suministro y la cooperación internacional, para reducir el comercio ilícito. Para ser vigente en Chile, el Protocolo tendrá que ser ratificado por el Congreso de acuerdo con la legislación nacional.
Sin embargo, los esfuerzos del gobierno para mejorar la fiscalización en general de la ley de tabaco se ven obstaculizados por la negativa del Congreso de aprobar mayores facultades para las autoridades sanitarias. Hace dos semanas, el Senado rechazó la propuesta legislativa que hubiera dado mayores facultades para fiscalizar, hacer estudios y sumarios sanitarios con respecto a este tipo de productos.
“Es una reforma esencial para el éxito de todas las demás”, dijo Ministro de Salud Jaime Mañalich, quien anunció que se repondrá la indicación en la Cámara de Diputados una vez que la ley haya sido despachada por el Senado, lo que podría ocurrir la semana entrante.